Esta vez, la sentada fue organizada por alumnas de otros colegios, con el apoyo de sus pares del Roque, vecinas y madres.
PEDIDOS. “No nos conocemos pero nos apoyamos”, “No más acoso en las escuelas”, “El abuso no se defiende”…
Tras la denuncia pública de las alumnas del Instituto Roque González de padecer situaciones de acoso y abuso por parte de sus compañeros, las voces de las estudiantes se escuchan cada vez más fuerte. Convocada por alumnas de distintas instituciones educativas tuvo lugar ayer al mediodía una nueva sentada frente al Roque González, ya no en el patio de la institución sino sobre la calle Colón. Las adolescentes se concentraron frente a este colegio privado no sólo para expresar su apoyo a las alumnas del Roque, sino también para alertar que estas situaciones se repiten en casi todos los colegios y que están hartas de no ser escuchadas.
Aunque en algunos casos se podía inferir a qué instituciones pertenecían por sus polleras o partes de su uniforme, la consigna fue que se manifestara sin insignias. En esta ocasión, además de algunos compañeros varones que acompañaron el reclamo también se sumaron madres y otras mujeres identificadas con la lucha.
Las adolescentes anticiparon que están evaluando la posibilidad de una tercera sentada, quizás en la costanera de Posadas.
“Hablan de violadores, pero no lo son, son abusadores” “Acá hay chicas de muchos colegios porque lo que pasó no es propio del Roque, pero el punto de convocatoria fue frente a este instituto porque fuimos las primeras en alzar la voz”, contó una de las alumnas.
Aseguró que “los docentes y preceptores no sabían del abuso, pero sí del bullying porque en varias oportunidades acudimos a ellos, pero nos respondían que no le diéramos importancia o nos preguntaban si estábamos seguras que realmente hubiera pasado eso”.
Lamentaron la difusión de los nombres de sus compañeros en las redes, “algunos de los nombrados no participaron en esto, no vamos a mentir, la gente habla de violadores pero no lo son, son abusadores”, aseveraron.
Contaron que ayer no sólo fue a la escuela el juez César Jiménez sino además un especialista en Educación Sexual Integral (ESI) y un psicólogo, “pero estas charlas tenemos que tener por lo menos una vez por mes y no sólo cuando ocurren estas cosas. En el Roque no tenemos ESI”, remarcó.
“Sentimos que se nos fue de las manos” La difusión de la situación y la viralización de las capturas del chat de algunos varones movilizó no sólo la adhesión social al reclamo de las chicas sino también mensajes muy agresivos contra los alumnos involucrados y contra el Roque González. Sus propias compañeras contaron ayer con angustia que sus compañeros no fueron a la escuela ayer porque recibieron numerables amenazas contra su integridad.
“También las chicas que se animaron a denunciar lo que estaba pasando recibieron mensajes intimidantes de personas desconocidas, la verdad es que algunas alumnas del segundo año sentimos que se nos fue de la mano toda esta situación… incluso una de las chicas no quiso sumarse hoy (por ayer) a la sentada organizada por las chicas de otros colegios en adhesión a la lucha contra la violencia sufrida y para hacer público que esto se repite en los otros secundarios”, contó una alumna de segundo año del Roque.